Formación

La configuración a Jesucristo y la identidad vocacional y carismática están al centro de todo el proceso formativo de la hermana Misionera de San Carlos Borromeo Scalabriniana. Esto facilita y ayuda a vivir y a asumir progresivamente la espiritualidad scalabriniana como prolongación de la encarnación de Cristo entre los migrantes.
El seguimiento radical a Jesucristo es el fundamento de la vida consagrada. Los miembros de la Congregación viven este seguimiento a través de la consagración total a Dios, por medio de los consejos evangélicos de castidad, pobreza y obediencia, según el carisma scalabriniano de servicio a los migrantes.
Constitución n. 2.
La formación se lleva a cabo a través de un proceso global, gradual y continuo, con la finalidad de promover la madurez integral de la persona llamada y de crear condiciones para que la misma persona pueda adherirse a los valores scalabriniano, tales como:
Constitución 3
Los medios que a lo largo de la historia de la Congregación, han demostrado ser validos para garantizar un proceso formativo apostólico eficaz son: oración, acompañamiento, estudio y experiencia apostólica-misionera.
PASTORAL VOCACIONAL
La pastoral vocacional surge del misterio de la Iglesia, es intrínseca y fundamental para la vida y a la misión de la iglesia. Está integrada en la organización pastoral de la Iglesia local y tiene por finalidad el anuncio de Jesucristo y la belleza del don total de sí mismo a la causa del Evangelio.
Constitución n. 73
FORMACIÓN INICIAL
Las fases del proceso formativo son: aspirantado, postulantado, noviciado, juniorado que concluyen con la admisión a la profesión perpetua.
Cada etapa tiene objetivos por alcanzar, que coinciden con una adecuada madurez para quien aspira a ser hermana Misionera Scalabriniana.
La experiencia formativa es la condición esencial para asumir los valores y la decisión de alcanzar la finalidad de la formación scalabriniana. El proceso formativo es dinámico por eso constantemente es evaluado para favorecer el discernimiento de la propia vocación y de las actitudes solicitadas para actuar en la Congregación Scalabriniana.
FORMACIÓN PERMANENTE
La formación permanente es el compromiso personal y comunitario para consolidar la configuración a Jesucristo y la identidad scalabriniana. La comunidad es un lugar privilegiado de formación permanente. En ella vivimos la experiencia de la comunión en la diferencias, capaces de suscitar un dinámico crecimiento humano y espiritual y la fidelidad creativa del carisma.
Constitución n. 107 y 109
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